Al inicio de su rutina Leguizamo cuenta una anécdota en la que habla con su hijo, quien está viendo una película de vaqueros. Leguizamo le explica a su hijo que no debería estar del lado de los vaqueros, puesto que ellos, Leguizamo e hijo, son indios. ¿Qué indio va a ser Leguizamo? El pana es nacido en Colombia. ¿En qué cabeza cabe que un colombiano y un navajo sean de la misma raza y cultura? Yo te digo en qué cabeza cabe, en la cabeza de los americanos que andan buscando otredades, que están buscando aislarse, que están buscando grupos minoritarios desde los cuales reclamar más. En fin.
Es evidente a un «latino» que la cultura chilena nada tiene que ver con la hondureña, pero para ellos, los norteamericanos, nosotros somos todos los latinos. Entonces Leguizamo exige que todo lo latino sea asequible para su hijo— que estudia en los Estados Unidos. Hombre, lo normal es que en los Estados Unidos estudien principalmente la historia de los Estados Unidos. Yo fui estudiante en un colegio estadounidense; había una clase de historia de los Estados Unidos y clase una de historia universal, y se tenía que estudiar ambas. Supongo que no será igual en cada esquina de un país tan grande, pero lo cierto es que a mí, como ecuatoriano, me tocó aprender de la historia de mi país por otras fuentes. Mas en mi colegio sí me enseñaron de la historia de América latina: no demasiado, es verdad, pero tampoco es que se la obvió. Quizás el hijo de Leguizamo deba acceder a una biblioteca para complementar su formación, ¡qué terrible!
Está muy bien valorar las raíces de uno. Tampoco es anormal que tenga que ser el núcleo familiar quien inculque en los niños el amor cívico. Las exigencias de Leguizamos son desmedidas. La idea de que todos los latinos tenemos una sola cultura es, en sí, propia de quienes no son parte del gran relato latinoamericano, y es ridícula. Algo parecido me pasó cuando estudié en Barcelona: muchos de mi grupo de amigos «latinos» a menudo despotricaban contra los compañeros catalanes, recordando las épocas de la conquista y remontando a esos orígenes los males actuales de nuestra América. No sé yo, que España conquistó América, sí, pero que también luego nos liberamos, ¿no? Y hoy en día nuestros males derivan de nuestros gobiernos corruptos, conformados de gente endémica de nuestras tierras. Si queremos culpar al otro de nuestros problemas nunca vamos a tomarnos la responsabilidad de verdaderamente resolver lo que nos aqueja.