Muy entretenido, y ¡qué gráficos!
Oí en el podcast «Sacred Symbols» que este era un juego entretenido y gracioso y, sin haber jugado la versión de 2005, decidí comprarlo. Y la recomendación salió buena, pues efectivamente es un juego que mucho alegra el día. Es fácil, sí, y las mejoras que uno puede hacerle al protagonista facilitan aún más el juego, pero lo esencial aquí es el espectáculo visual, que los gráficos son muy buenos, y el tono ameno y ligero que tiene. Además de las misiones, que son agradecidamente cortas, se puede volver a los lugares donde uno ya ha estado para desatar allí un poco de caos libremente; esto aspecto, el de la «caja de arena» en la que uno puede explayarse a sus anchas es a través del lenguaje universal de la destrucción es, creo, el punto fuerte del juego, y recuerda un poco la libertad con la se podía uno divertir en los primeros Grand Theft Auto.
En sí, la historia no es mala– hasta algo de sentido tiene; si se quiere luego analizar el «por qué» de cada cosa, se rompe un poco la fantasía, pero supongo que esto es cierto en cualquier obra de ficción. Pensé a priori que no iba disfrutar de las partes del juego en las que uno debe andar sigilosamente por el mapa (dentro de que los juegos de sigilo son de mis favoritos) porque este juego se luce más cuando uno está disparándole a todo lo que se mueve, pero prontamente me pude adaptar a este «modo», que, a fin de cuentas, algo chirría pero es también necesario para poner en relieve la destrucción que nuestro marcianito verde causa.
Lo jugué diez horas, y fácilmente hay para más. Lo que sí confieso es que no pude con el «jefe» final, y la pelea es tan larga que no la intenté muchas veces. Quizás algún día vuelva y lo termine, pero en realidad no creo que no haberlo podido terminar haya mermado mi experiencia, pues en todo momento se puede repetir las misiones o ir libremente a cada ubicación a ganar más puntos para luego invertirlos en las mejoras.
Quiero volver a destacar los gráficos, que no esperaba que lucieran tan bien, y aprovecho para agregar que, desgraciadamente, en mi pantalla no se podían leer bien los subtítulos– parece que hay un error en la programación y si el texto es muy largo, se sale de la pantalla por ambos lados. Pero más allá de esta nimia queja, el juego está muy bien, es muy entretenido, y es, a mi criterio, de la extensión perfecta.
Imagen de Wagnerf vía https://www.deviantart.com/wagnerf/art/crypto-97431318