Reseña: «Sniper Elite 5»

Un poco de indulgencia.

Antes de decir nada más, confieso que estos juegos me gustan mucho. El primero que jugué fue el tercero, y desde ahí no hay más que idilio. El cuarto me pareció muy superior al tercero, y el quinto está más o menos al nivel del cuarto. Este juego padece de ciertas cuestiones que no sé cómo llamarles más allá de decirles boberías. Y hay muchas boberías.

Karl, el francotirador, a veces mira a través del la mirilla de su rifle, pero no puede disparar porque, sin saberlo, uno está detrás una pared. A veces uno está caminando por ahí, tranquilo, y de repente ve a un enemigo, y al momento de acercárcele, resulta que uno está en el límite del mapa, que es invisible, pero el enemigo está un metro más allá, protegido por la gracia intangible de un Dios que lo cuida.

A veces Karl es un Bruce Lee del combate mano a mano, a veces, si el rival gira la espina un poco más lejos de lo esperado, es el fin de Karl. A veces los enemigos te ven mientras estás quieto, en las sombras, y lejos, y otras, el plena luz del día, son mucho más despistados. La experiencia es inconsistente. Sin embargo, los momentos de alegría exceden a los de frustración, que no se limitan a problemas de colisión: la dirección del juego es bastante rara, y hay planos y contraplanos que ni cuando uno empezaba los estudios de comunicación audiovisual los hacía tan feos.

Algunos modelos de los jugadores son técnicamente perfectos, pero no los de Karl y sus amigos, que algo tiene que hace que los vea bastante tiesos, falsos. Mas en fin, esto no es una película de Tarantino: quiero decir que estos últimos detalles se acusan raramente, porque lo que uno pasa haciendo más a menudo es reptando, tendiendo trampas, esperando a que un alemán se cruce para poder capturarlo con los binoculares, funciona y funciona bien. Y más allá de esos modelos raros, que igual casi nunca se ven, los escenarios son súper chéveres, diversos, reales, y estéticamente hermosos. Ni una guerra le quita a Francia su belleza.

Por lo demás, este juego mejora varias cosas al anterior. Hay menos necesidad de andar hurgándole los bolsillos a todos los caídos, y los objetivos opcionales se encuentran orgánicamente (lo que a veces puede ser una decepción). Hay más armas que uno pueden encontrar por ahí para ayudarse, y más vías de infiltrarse y exfiltrarse. Hay hasta unas formas de asesinar que citan mucho a Hitman, y de eso no hay nada malo.

Este es el primer juego de los que juego de esta saga en la que no siento la necesidad de eliminar a todo y todos, porque se recompensa tanto o más sigilo y la vía no letal que sus alternativas. Es, así, el más abierto de los mundos abiertos de esta saga. Este título es para los que seguimos esperando un Metal Gear, para los que el Splinter Cell se empieza a hacer repetitivo. A mí me duró casi treinta horas y las disfruté un montón, y lo recomiendo a quienes, como yo, estén preparados para darle la indulgencia que (no) se merece.

Rebellion Developments. Sniper Elite 5. Rebellion Developments, 2022. https://store.steampowered.com/app/1029690/Sniper_Elite_5/.
 

Imagen de https://news.xbox.com/en-us/2021/12/10/introducing-sniper-elite-5/